Castillo abandonado de Puilaurens, Lapradelle-Puilaurens, Aude
Turismo sostenible Francia
El castillo de Puilaurens se encuentra ubicado en la cima de un imponente espolón rocoso que domina el valle del río Boulzane a una altitud de 697 metros, es un tesoro histórico y un destino turístico imperdible en el sur de Francia.
Este castillo cátaro, parte de los cinco hijos de la ciudad de Carcasona, deslumbra a los visitantes con su arquitectura medieval y su fascinante historia y se ha convertido en un ejemplo destacado de turismo sostenible en la región.
Conocido localmente como el "Monte Ardu", el nombre de Puilaurens apareció por primera vez en el año 958 en una carta que otorgaba a la Abadía de San Miguel de Cuixà el prebostazgo de Puilaurens, que comprendía el valle del río Boulzane.
Desde la época carolingia, el castillo también albergaba una iglesia consagrada a San Lorenzo, que servía como refugio fortificado, durante la cruzada contra los albigenses, el castillo desempeñó un papel importante como refugio.
En 1250, el castillo pasó a manos de la Corona francesa, y el rey Luis IX ordenó fortificarlo en 1255.
Como consecuencia del tratado de Corbeil en 1258, el castillo se convirtió en una de las fortalezas defensivas francesas frente al Reino de Aragón, esistiendo numerosos ataques aragoneses y se consolidó como la fortaleza más meridional del recién expandido reino de Francia.
A partir del Tratado de los Pirineos en 1659, que estableció la frontera franco-española en las crestas pirenaicas, el castillo de Puilaurens, al igual que los otros hijos de Carcasona, fue gradualmente abandonado, quedando apenas una débil guarnición ocupó puntualmente la ciudadela, así el castillo fue descuidado y finalmente abandonado tras la Revolución francesa.
El castillo de Puilaurens sigue siendo un lugar de leyendas y misterio.
Se dice que la Dama Blanca, nieta de Felipe IV de Francia, camina por las noches entre las desmanteladas almenas con sus vaporosos velos. Estas historias evocadoras añaden un encanto especial al entorno.
La ubicación del castillo en un área de gargantas estrechas crea un ambiente salvaje y fascinante, convirtiéndolo en un destino ideal para el turismo sostenible en Francia.
Los visitantes pueden explorar los paisajes naturales circundantes, disfrutar de caminatas escénicas y practicar senderismo en la región. Además, el castillo de Puilaurens es un excelente ejemplo de conservación histórica y preservación del patrimonio.
Los horarios de visita son accesibles para los turistas, ya que el castillo está abierto todos los días de 10 a.m. a 6 p.m.
Aquellos que deseen obtener más información o realizar reservas pueden comunicarse al teléfono de contacto +33 4 68 20 65 26.
Cómo llegar desde Girona.
Cómo llegar desde Perpiñan.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
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Puilaurens
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Turismo sostenible Francia
El castillo de Puilaurens se encuentra ubicado en la cima de un imponente espolón rocoso que domina el valle del río Boulzane a una altitud de 697 metros, es un tesoro histórico y un destino turístico imperdible en el sur de Francia.
Este castillo cátaro, parte de los cinco hijos de la ciudad de Carcasona, deslumbra a los visitantes con su arquitectura medieval y su fascinante historia y se ha convertido en un ejemplo destacado de turismo sostenible en la región.
Conocido localmente como el "Monte Ardu", el nombre de Puilaurens apareció por primera vez en el año 958 en una carta que otorgaba a la Abadía de San Miguel de Cuixà el prebostazgo de Puilaurens, que comprendía el valle del río Boulzane.
Desde la época carolingia, el castillo también albergaba una iglesia consagrada a San Lorenzo, que servía como refugio fortificado, durante la cruzada contra los albigenses, el castillo desempeñó un papel importante como refugio.
En 1250, el castillo pasó a manos de la Corona francesa, y el rey Luis IX ordenó fortificarlo en 1255.
Como consecuencia del tratado de Corbeil en 1258, el castillo se convirtió en una de las fortalezas defensivas francesas frente al Reino de Aragón, esistiendo numerosos ataques aragoneses y se consolidó como la fortaleza más meridional del recién expandido reino de Francia.
A partir del Tratado de los Pirineos en 1659, que estableció la frontera franco-española en las crestas pirenaicas, el castillo de Puilaurens, al igual que los otros hijos de Carcasona, fue gradualmente abandonado, quedando apenas una débil guarnición ocupó puntualmente la ciudadela, así el castillo fue descuidado y finalmente abandonado tras la Revolución francesa.
El castillo de Puilaurens sigue siendo un lugar de leyendas y misterio.
Se dice que la Dama Blanca, nieta de Felipe IV de Francia, camina por las noches entre las desmanteladas almenas con sus vaporosos velos. Estas historias evocadoras añaden un encanto especial al entorno.
La ubicación del castillo en un área de gargantas estrechas crea un ambiente salvaje y fascinante, convirtiéndolo en un destino ideal para el turismo sostenible en Francia.
Los visitantes pueden explorar los paisajes naturales circundantes, disfrutar de caminatas escénicas y practicar senderismo en la región. Además, el castillo de Puilaurens es un excelente ejemplo de conservación histórica y preservación del patrimonio.
Los horarios de visita son accesibles para los turistas, ya que el castillo está abierto todos los días de 10 a.m. a 6 p.m.
Aquellos que deseen obtener más información o realizar reservas pueden comunicarse al teléfono de contacto +33 4 68 20 65 26.
Cómo llegar desde Girona.
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