Parroquias abandonadas: Santo Adriano del Monte, Grado
En el concejo de Grado, se yergue un testimonio silencioso de tiempos pasados: Santo Adriano del Monte, una parroquia abandonada que susurra historias olvidadas.
Con una extensión de 8,88 km² y sin población empadronada, este enclave encierra los ecos de antaño, resonando con los pasos de aquellos que una vez lo llamaron hogar.
El nombre de Santo Adriano del Monte rinde homenaje a Adriano de Nicomedia, santo venerado por la Iglesia católica.
Históricamente, este pueblo fue otorgado a sus habitantes por el obispo de Oviedo a cambio de lealtad y tributos.
La vida fluía en sus calles empedradas, con 22 vecinos registrados y 110 almas que encontraban sustento y comunidad entre sus muros, pero el tiempo, implacable, dejó su marca, y hoy las casas vacías y las ruinas son todo lo que queda de aquellos días.
En el corazón de Santo Adriano del Monte se encuentra la capilla de Nuestra Señora de la Natividad, que son un recordatorio de la fe que alguna vez llenó estos valles.
La desolación también se extiende a La Condesa, un despoblado que se une al silencio de este lugar olvidado.
A las faldas de este monte solitario a apenas 600 metros se encuentra L'Hortigal, otro despoblado que ofrece vistas impresionantes del paisaje circundante.
Iglesia Nuestra Señora de la Natividad..
En Grado, puedes visita las antiguas murallas que lo rodean y que cuentan sus propias historias.
En los alrredeores puedes encontrar las Cascadas de Guanga que susurran melodías de la naturaleza.
Ayuntamiento de Grado.
Como llegar desde Oviedo.
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