Ruinas del poblado de minas de Wolframio: Peña del Seo, Cadafresnas, Corullón, El Bierzo
Las ruinas del poblado de las minas de Wolframio de la Peña del Seo, también conocido como poblado de la Piela, representan un testimonio tangible de la historia minera en la región.
Este poblado en ruinas se encuentra situado a los pies de la Peña del Seo, una imponente montaña de 1.576 metros de altura, fue erigido en 1952 y comenzó a ser habitable al año siguiente, en 1953.
El poblado estaba compuesto por 41 viviendas, cada una con una superficie de aproximadamente 60 metros cuadrados, diseñadas especialmente para los residentes.
Los mineros solteros, por su parte, residían en los sótanos del poblado. Cada vivienda contaba con dos habitaciones, un baño con ducha, una pequeña cocina, un salón comedor y una despensa.
La presencia de una cocina calefactora con calderín permitía que todas las viviendas tuvieran calefacción y agua caliente, mientras que la electricidad provenía de una red de 125 voltios.
El origen del poblado se remonta al descubrimiento del mineral de wolframio, también conocido como tungsteno, en el año 1940.
A medida que las labores mineras se intensificaban, el poblado crecía para dar cabida a la creciente población de trabajadores.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el mineral era extraído de manera furtiva y desorganizada, pero fue durante la Guerra de Corea (1950-1953) cuando la explotación alcanzó su máximo apogeo.
En esta época, se llegaron a vender hasta seis toneladas de mineral al mes, pero tras el cierre de las minas en 1958 el poblado comenzó a declinar debido a la baja demanda de wolframio,
El poblado continuó habitado, principalmente por el guardián de la mina y su familia, quienes se encargaban del mantenimiento de las instalaciones..
En 1974, el poblado fue abandonado, lo que provocó el expolio y el posterior deterioro de las estructuras.
Hoy en día el poblado se encuentran en un estado de ruina total.
Ruinas del poblado minero.
Actualmente, se están tramitando proyectos para la instalación de tres parques eólicos en la zona, lo que amenaza el proyecto de recuperación del poblado minero.
Además de conocer las ruinas del poblado, en Cadafresno los visitantes pueden explorar el santuario de la Virgen del Castaño de Trabadelo.
Cerca de allí, en el pueblo de Corullón, se encuentra el Columpio de Corullón, desde donde se puede disfrutar de impresionantes vistas del Bierzo.
Los visitantes pueden llegar al columpio a pie siguiendo la ruta del Castillo, que parte de la Iglesia de San Miguel, o en coche.
Ayuntamiento de Corullón.
Como llegar desde León.
Antes de programar una visita sugerimos consultar con el ayuntamiento del lugar.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
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Conoce en El Bierzo la ingeniería romana de las cuevas de la Palomera, que se encuentran muy cerca del pueblo abandonado de La Balouta
Peña del Seo - de la Piela
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Este poblado en ruinas se encuentra situado a los pies de la Peña del Seo, una imponente montaña de 1.576 metros de altura, fue erigido en 1952 y comenzó a ser habitable al año siguiente, en 1953.
El poblado estaba compuesto por 41 viviendas, cada una con una superficie de aproximadamente 60 metros cuadrados, diseñadas especialmente para los residentes.
Los mineros solteros, por su parte, residían en los sótanos del poblado. Cada vivienda contaba con dos habitaciones, un baño con ducha, una pequeña cocina, un salón comedor y una despensa.
La presencia de una cocina calefactora con calderín permitía que todas las viviendas tuvieran calefacción y agua caliente, mientras que la electricidad provenía de una red de 125 voltios.
El origen del poblado se remonta al descubrimiento del mineral de wolframio, también conocido como tungsteno, en el año 1940.
A medida que las labores mineras se intensificaban, el poblado crecía para dar cabida a la creciente población de trabajadores.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el mineral era extraído de manera furtiva y desorganizada, pero fue durante la Guerra de Corea (1950-1953) cuando la explotación alcanzó su máximo apogeo.
En esta época, se llegaron a vender hasta seis toneladas de mineral al mes, pero tras el cierre de las minas en 1958 el poblado comenzó a declinar debido a la baja demanda de wolframio,
El poblado continuó habitado, principalmente por el guardián de la mina y su familia, quienes se encargaban del mantenimiento de las instalaciones..
En 1974, el poblado fue abandonado, lo que provocó el expolio y el posterior deterioro de las estructuras.
Hoy en día el poblado se encuentran en un estado de ruina total.
Ruinas del poblado minero.
Actualmente, se están tramitando proyectos para la instalación de tres parques eólicos en la zona, lo que amenaza el proyecto de recuperación del poblado minero.
Además de conocer las ruinas del poblado, en Cadafresno los visitantes pueden explorar el santuario de la Virgen del Castaño de Trabadelo.
Cerca de allí, en el pueblo de Corullón, se encuentra el Columpio de Corullón, desde donde se puede disfrutar de impresionantes vistas del Bierzo.
Los visitantes pueden llegar al columpio a pie siguiendo la ruta del Castillo, que parte de la Iglesia de San Miguel, o en coche.
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