Fortaleza militar en el camino de Santiago, castillo de Burgos
El Castillo de Burgos se encuentra situado en la cima del cerro del pueblo de Castillo y se alza a 75 metros sobre la ciudad.
Su historia se remonta al año 884 cuando el conde Diego Porcelos erigió la primera torre durante la Reconquista, y a medida que la importancia estratégica del lugar creció, el castillo evolucionó con elementos defensivos más complejos.
Dentro de su complejo subterráneo destaca el pozo, conocido como Cueva del Moro, con galerías de más de 300 metros de longitud, que se cree que data de los siglos XII y XIII y tuvo un papel relevante durante el asedio de Isabel la Católica en 1475.
El cerro del Castillo y el cerro de San Miguel, con vestigios de asentamientos desde el Neolítico hasta la Edad del Hierro, ofrecen vistas panorámicas de la ciudad y el valle del Arlanzón.
Conocido también como el Palacio de Alfonso X, el castillo albergó a Juan II de Castilla y Enrique III de Castilla, además de ser prisión de Estado para reyes como García de Galicia y Alfonso VI de León, así como para Tomás de Gournay, asesino del rey Eduardo II de Inglaterra.
Aunque perdió su función defensiva con la evolución de las técnicas militares y la lejanía de los conflictos bélicos en la Edad Moderna, el castillo albergó la primera escuela de formación para artilleros en el siglo XVI.
Un incendio en 1736 devastó su interior, pero durante la Guerra de la Independencia, los franceses lo acondicionaron para usos estratégicos.
Durante el asedio de Burgos en 1812, el castillo fue protagonista central en la lucha entre las tropas angloportuguesas dirigidas por Arthur Wellesley (duque de Wellington) y los franceses. Tras la retirada de estos últimos en 1813, el castillo fue volado para evitar que cayera en manos enemigas, resultando en la muerte de más de 200 soldados franceses.
En el siglo XIX, el castillo se utilizó ocasionalmente en las guerras carlistas y durante la Guerra Civil de 1936 albergó defensas antiaéreas y además, desempeñó un papel importante en el sistema de comunicaciones del telégrafo óptico del siglo XIX.
Hoy en día, el entorno del castillo es un parque de recreo con calles dedicadas a poetas, y parte de su estructura ha sido reconstruida para convertirse en un centro de interpretación.
El lugar es parte del Camino de Santiago Francés y esta declarado como Bien de Interés Cultural, contribuyendo a un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad en Burgos.
Ayuntamiento de Burgos.
Cómo llegar desde la estación de Ferrocarril de Burgos.
Antes de programar una visita sugerimos consultar con el ayuntamiento del lugar.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
.jpg){kind=small}
Conoce un castillo de cuento de hadas.
Burgos
16 artículos más con lugares en la misma zona
Lugares que has visto
El Castillo de Burgos se encuentra situado en la cima del cerro del pueblo de Castillo y se alza a 75 metros sobre la ciudad.
Su historia se remonta al año 884 cuando el conde Diego Porcelos erigió la primera torre durante la Reconquista, y a medida que la importancia estratégica del lugar creció, el castillo evolucionó con elementos defensivos más complejos.
Dentro de su complejo subterráneo destaca el pozo, conocido como Cueva del Moro, con galerías de más de 300 metros de longitud, que se cree que data de los siglos XII y XIII y tuvo un papel relevante durante el asedio de Isabel la Católica en 1475.
El cerro del Castillo y el cerro de San Miguel, con vestigios de asentamientos desde el Neolítico hasta la Edad del Hierro, ofrecen vistas panorámicas de la ciudad y el valle del Arlanzón.
Conocido también como el Palacio de Alfonso X, el castillo albergó a Juan II de Castilla y Enrique III de Castilla, además de ser prisión de Estado para reyes como García de Galicia y Alfonso VI de León, así como para Tomás de Gournay, asesino del rey Eduardo II de Inglaterra.
Aunque perdió su función defensiva con la evolución de las técnicas militares y la lejanía de los conflictos bélicos en la Edad Moderna, el castillo albergó la primera escuela de formación para artilleros en el siglo XVI.
Un incendio en 1736 devastó su interior, pero durante la Guerra de la Independencia, los franceses lo acondicionaron para usos estratégicos.
Durante el asedio de Burgos en 1812, el castillo fue protagonista central en la lucha entre las tropas angloportuguesas dirigidas por Arthur Wellesley (duque de Wellington) y los franceses. Tras la retirada de estos últimos en 1813, el castillo fue volado para evitar que cayera en manos enemigas, resultando en la muerte de más de 200 soldados franceses.
En el siglo XIX, el castillo se utilizó ocasionalmente en las guerras carlistas y durante la Guerra Civil de 1936 albergó defensas antiaéreas y además, desempeñó un papel importante en el sistema de comunicaciones del telégrafo óptico del siglo XIX.
Hoy en día, el entorno del castillo es un parque de recreo con calles dedicadas a poetas, y parte de su estructura ha sido reconstruida para convertirse en un centro de interpretación.
El lugar es parte del Camino de Santiago Francés y esta declarado como Bien de Interés Cultural, contribuyendo a un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad en Burgos.
Ayuntamiento de Burgos.
Cómo llegar desde la estación de Ferrocarril de Burgos.
Antes de programar una visita sugerimos consultar con el ayuntamiento del lugar.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
Conoce un castillo de cuento de hadas.