Ruinas arqueológicas fantasmas en Barcelona, Olèrdola, Garraf
Ruinas arqueológicas de Olerdola
En el Garraf y dentro del Parque Natural del mismo nombre se halla un conjunto arqueológico totalmente en ruinas y con 4000 años de antigüedad.
El conjunto histórico de Olérdola se sitúa en la montaña de San Miguel de Olérdola.
Esta montaña constituye una plataforma rocosa inclinada que se halla en las estribaciones meridionales del Macizo del Garraf.
Los íberos cesetanos ( íberos de Catalunya) los hallamos instalados en Olérdola entre la segunda mitad del siglo v a. C hasta el siglo II A.C.
Los primeros moradores de Olérdola de los que se tiene constancia llegaron a la montaña a mediados de la Edad del Bronce.
No obstante, la presencia de un vaso cerámico del tipo campaniforme de estilo regional hallado entre el relleno de la fosa abierta para levantar la muralla romana, nos indica una posible ocupación anterior, de inicios del período del Bronce.
A partir de la llegada de los romanos, este enclave fue esencial para el proceso de control y reorganización de la zona y vía de acceso a la capital de Tarraco.
También se han encontrado ánforas halladas procedentes del mundo púnico y helenístico.
A finales del siglo X, el conde de Barcelona ordenó construir una nueva muralla para proteger a los habitantes del lugar de los ataques de los árabes, así como la iglesia de Sant Miquel y el castillo de Olèrdola monumentos de los que se conservan numerosas estructuras.
Ruinas romanas en Olerdola.
Los condes se vieron en la necesidad de proteger a los campesinos que se instalaron en pequeños núcleos de las zonas fronterizas, organizar los nuevos territorios y construir castillos en ellos.
Estos asentamientos atrajeron la presencia al Garraf de numerosos campesinos del sur de Francia y de la zona de la actual Gerona, de esta forma se solidificaba y cohesionaba población bajo la misma religión.
El conjunto histórico de Olérdola se sitúa en la montaña de San Miguel de Olérdola.
Esta montaña constituye una plataforma rocosa inclinada que se halla en las estribaciones meridionales del Macizo del Garraf.
Los íberos cesetanos ( íberos de Catalunya) los hallamos instalados en Olérdola entre la segunda mitad del siglo v a. C hasta el siglo II A.C.
Los primeros moradores de Olérdola de los que se tiene constancia llegaron a la montaña a mediados de la Edad del Bronce.
No obstante, la presencia de un vaso cerámico del tipo campaniforme de estilo regional hallado entre el relleno de la fosa abierta para levantar la muralla romana, nos indica una posible ocupación anterior, de inicios del período del Bronce.
A partir de la llegada de los romanos, este enclave fue esencial para el proceso de control y reorganización de la zona y vía de acceso a la capital de Tarraco.
También se han encontrado ánforas halladas procedentes del mundo púnico y helenístico.
Todos Los restos arqueológicos hallados se encuentran dentro del perímetro amurallado.
Este lugar fue un importante enclave militar para la reconquista de Tarragona a los árabes. A finales del siglo X, el conde de Barcelona ordenó construir una nueva muralla para proteger a los habitantes del lugar de los ataques de los árabes, así como la iglesia de Sant Miquel y el castillo de Olèrdola monumentos de los que se conservan numerosas estructuras.
Ruinas romanas en Olerdola.
Los condes se vieron en la necesidad de proteger a los campesinos que se instalaron en pequeños núcleos de las zonas fronterizas, organizar los nuevos territorios y construir castillos en ellos.
Estos asentamientos atrajeron la presencia al Garraf de numerosos campesinos del sur de Francia y de la zona de la actual Gerona, de esta forma se solidificaba y cohesionaba población bajo la misma religión.
En Olerdola visita la iglesia medieval de Sant Miquel y junto a esta iglesia, las tumbas antropomórficas de la Necrópolis San Miquel.
Antes de programar una visita sugerimos consultar con el ayuntamiento del lugar.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
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Conoce la villa romana en Mallorca que fue importante productora de vino.
Olèrdola
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Ruinas arqueológicas de Olerdola
En el Garraf y dentro del Parque Natural del mismo nombre se halla un conjunto arqueológico totalmente en ruinas y con 4000 años de antigüedad.
El conjunto histórico de Olérdola se sitúa en la montaña de San Miguel de Olérdola.
Esta montaña constituye una plataforma rocosa inclinada que se halla en las estribaciones meridionales del Macizo del Garraf.
Los íberos cesetanos ( íberos de Catalunya) los hallamos instalados en Olérdola entre la segunda mitad del siglo v a. C hasta el siglo II A.C.
Los primeros moradores de Olérdola de los que se tiene constancia llegaron a la montaña a mediados de la Edad del Bronce.
No obstante, la presencia de un vaso cerámico del tipo campaniforme de estilo regional hallado entre el relleno de la fosa abierta para levantar la muralla romana, nos indica una posible ocupación anterior, de inicios del período del Bronce.
A partir de la llegada de los romanos, este enclave fue esencial para el proceso de control y reorganización de la zona y vía de acceso a la capital de Tarraco.
También se han encontrado ánforas halladas procedentes del mundo púnico y helenístico.
A finales del siglo X, el conde de Barcelona ordenó construir una nueva muralla para proteger a los habitantes del lugar de los ataques de los árabes, así como la iglesia de Sant Miquel y el castillo de Olèrdola monumentos de los que se conservan numerosas estructuras.
Ruinas romanas en Olerdola.
Los condes se vieron en la necesidad de proteger a los campesinos que se instalaron en pequeños núcleos de las zonas fronterizas, organizar los nuevos territorios y construir castillos en ellos.
Estos asentamientos atrajeron la presencia al Garraf de numerosos campesinos del sur de Francia y de la zona de la actual Gerona, de esta forma se solidificaba y cohesionaba población bajo la misma religión.
El conjunto histórico de Olérdola se sitúa en la montaña de San Miguel de Olérdola.
Esta montaña constituye una plataforma rocosa inclinada que se halla en las estribaciones meridionales del Macizo del Garraf.
Los íberos cesetanos ( íberos de Catalunya) los hallamos instalados en Olérdola entre la segunda mitad del siglo v a. C hasta el siglo II A.C.
Los primeros moradores de Olérdola de los que se tiene constancia llegaron a la montaña a mediados de la Edad del Bronce.
No obstante, la presencia de un vaso cerámico del tipo campaniforme de estilo regional hallado entre el relleno de la fosa abierta para levantar la muralla romana, nos indica una posible ocupación anterior, de inicios del período del Bronce.
A partir de la llegada de los romanos, este enclave fue esencial para el proceso de control y reorganización de la zona y vía de acceso a la capital de Tarraco.
También se han encontrado ánforas halladas procedentes del mundo púnico y helenístico.
Todos Los restos arqueológicos hallados se encuentran dentro del perímetro amurallado.
Este lugar fue un importante enclave militar para la reconquista de Tarragona a los árabes. A finales del siglo X, el conde de Barcelona ordenó construir una nueva muralla para proteger a los habitantes del lugar de los ataques de los árabes, así como la iglesia de Sant Miquel y el castillo de Olèrdola monumentos de los que se conservan numerosas estructuras.
Ruinas romanas en Olerdola.
Los condes se vieron en la necesidad de proteger a los campesinos que se instalaron en pequeños núcleos de las zonas fronterizas, organizar los nuevos territorios y construir castillos en ellos.
Estos asentamientos atrajeron la presencia al Garraf de numerosos campesinos del sur de Francia y de la zona de la actual Gerona, de esta forma se solidificaba y cohesionaba población bajo la misma religión.
En Olerdola visita la iglesia medieval de Sant Miquel y junto a esta iglesia, las tumbas antropomórficas de la Necrópolis San Miquel.
Antes de programar una visita sugerimos consultar con el ayuntamiento del lugar.
Si ve algún dato que no es correcto le agradeceremos nos lo indique en Contacto.
Conoce la villa romana en Mallorca que fue importante productora de vino.